Esperaba una pulsera de tobillo de arresto domiciliario. Pero yo era culpable. Culpable de dos de los crímenes más atroces, estoy exiliado legítimamente de la compañía humana. He tenido un virus y soy viejo. No “EL” virus, y no tan viejo, pero en estos días y tiempos es suficiente para encarcelarme. Sin pruebas disponibles para verificar que no tengo el Corona virus que actualmente está aterrorizando a los pueblos de la tierra y está bloqueando vastas ciudades. 

Estoy en la Florida; la Región de Tampa Bay. Un lugar realmente hermoso en esta época del año. Aunque vivo a solo minutos de varias hermosas playas de arena blanca de azúcar, están prohibidas para mí. Actualmente están prohibidos para todos. Muchos de nosotros nos reunimos demasiado cerca después de ser advertidos, y ahora el privilegio y la alegría se nos han perdido. (Podría culpar a Daytona, y a todos esos universitarios ...) Pero, ¿cómo se puede encontrar una conexión de amor en una escena de distanciamiento social? Puede ser posible, pero sin duda es contra intuitivo.

Esto es de todo el planeta. Una crisis para el individuo, una crisis para regiones y naciones, una crisis para todo el planeta. Este es un momento en que ambos estamos aislados y unidos. Pero podríamos hacer una pausa aquí y considerar nuestro futuro. 

"Da un buen ejemplo. es mucha la gente en la que uno influye. Esta influencia puede ser buena o mala.” L. Ronald Hubbard.  www.elcaminoalafelicidad.mx @waytohappinesstampa