La empresa Apple pagó 60 millones de dólares a la firma Proview Shenzhen para poder destrabar la comercialización del iPad en China, según confirmó el abogado de la compañía que había iniciado la demanda por uso de marca a la estadounidense.

"El caso está cerrado" confirmó el abogado demandante Ma Dongxiar a la agencia DPA en Beijing, y confirmó que el pago fue realizado la semana pasada, en el marco de un acuerdo alcanzado en el tribunal provincial de Guangdong.

El departamento estatal de Industria y Comercio en China comunicó formalmente a la empresa Proview, que el nombre registrado pasaba a Apple.

En el 2009 la firma californiana compró los derechos mundiales para su tableta Ipad por 35.000 libras británicas (hoy 43.500 euros) a Proview Electronics de Taiwán, que usaba esa marca para una empresa que operaba en Gran Bretaña, IP Applications Development (IPAD).

Pero en China, Proview Shenzen aseguró no estar involucrada en el acuerdo y de hecho demostró que tenía registrado la marca IPad para una computadora personal que ya no comercializaba.

Con este acuerdo, Apple puso fin a la disputa legal que desencadenó la venta del popular iPad en el gigante asiático.