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La oposición a la vacunación obligatoria no es una novedad surgida con el COVID-19. El siguiente artículo fechado el 2 de noviembre del año 2000 lo comprueba
Estados Unidos - Nov. 2, 2000. Una organización de médicos líder a nivel nacional está pidiendo una moratoria sobre todas las vacunas exigidas por el gobierno y ha aprobado una resolución con ese fin en su reunión anual. Los miembros de la Asociación de Médicos y Cirujanos Estadounidenses (AAPS) votaron esta semana en su 57ª Reunión Anual en St. Louis para aprobar una resolución que pide el fin de las vacunas infantiles obligatorias. La resolución fue aprobada sin un solo voto "no". (Hoja informativa sobre la resolución y la vacuna obligatoria publicada en www.aapsonline.org).
"Nuestros niños enfrentan la posibilidad de muerte o efectos adversos graves a largo plazo de las vacunas obligatorias que no son necesarias o que tienen beneficios muy limitados", dijo Jane M. Orient, MD, directora ejecutiva de AAPS.
"Este no es un voto en contra de las vacunas", dijo el Dr. Orient. "Esta resolución sólo intenta detener los mandatos generales de vacunas por parte de agencias gubernamentales y distritos escolares que no tienen en cuenta los derechos de los padres o la condición médica individual del niño".
Los niños menores de 14 años tienen tres veces más probabilidades de sufrir efectos adversos, incluida la muerte, después de la vacuna contra la hepatitis B que de contraer la enfermedad en sí
Cuarenta y dos estados tienen políticas de vacunación obligatorias y muchos niños deben recibir 22 vacunas antes del primer grado. Además de eso, como condición para la asistencia escolar, muchos distritos escolares requieren la vacunación para enfermedades como la hepatitis B, principalmente una enfermedad de adultos, generalmente transmitida por múltiples parejas sexuales, abuso de drogas o una ocupación con exposición a la sangre. Y, sin embargo, los niños menores de 14 años tienen tres veces más probabilidades de sufrir efectos adversos, incluida la muerte, después de la vacuna contra la hepatitis B que de contraer la enfermedad en sí. Apenas la semana pasada, los estudiantes de Utica, Nueva York, fueron enviados a casa desde la escuela y se les dijo que no podían regresar hasta que los hubieran obligado a recibir las vacunas contra la hepatitis B.
Además, los servicios de protección infantil amenazaron a los padres con la posible incautación de sus hijos por "negligencia educativa". "Es obsceno amenazar con apoderarse de un niño solo porque sus padres se niegan a recibir un tratamiento médico que obviamente es innecesario y quizás incluso peligroso", dijo el Dr. Orient. "La AAPS cree que los padres, con el consejo de sus médicos, deben tomar decisiones sobre la atención médica de sus hijos, no los burócratas del gobierno. Esta resolución afirma esa posición".
(Nota: AAPS es una asociación profesional de médicos dedicada desde 1943 a la santidad de la relación médico-paciente).
Nota del editor: El anterior artículo data del año 2000 cuando ni siquiera existían las pandemias de "gripe H1N1" y "COVID-19", lo que demuestra que el lobby de las empresas privadas multinacionales farmacéuticas (AKA "Big Pharma") siempre ha recurrido al patrocinio de políticos (y medios de comunicación) para que sus gobiernos a sueldo impongan medidas coercitivas con el objetivo de favorecer el negocio de la vacunación a costa de sacrificar la salud de la población (incluso poniendo en riesgo la vida de niños sanos a los que el lobby farmacéutico insiste en medicalizarlos con drogas inyectables potencialmente mortales).
Los mandatos generales de vacunas por parte de agencias gubernamentales y distritos escolares no tienen en cuenta los derechos de los padres o la condición médica individual del niño