Escuchaba en una conversación accidental a alguien defendiendo la gestión de gobierno de la admitración Kirchner, y en esa defensa mencionaba los planes de vivienda que se habían hecho durante el mandato de los Kirchner.

Me parece muy bien porque para eso están en el gobierno, para darle una respuesta a la gente; pero meditaba en algo que va mucho más allá de un bienestar económico y que las personas que tenemos libertad de pensamiento valoramos mucho y defendemos con ahínco.

El valor de la libertad de pensamiento, muchas personas piensan con el estómago y quisá se conformen con un subsidio o un plan social; pero, en algunos países cómo por ejemplo Cuba, muchas personas, tal ves sin quererlo o sin haberlo imaginado, vendieron su libertad de expresión, vendieron su condición de ciudadanos de primera para terminar siendo una sociedad sometida por un tirano.

Tengo en casa a un animal, sin intención de ofender a nadie y menos al animal, por supuesto, le doy comida, casa y atención de primera, pero no deja de ser un animal, el ser humano es más que un animal, en el sentido que posee el don precioso del pensamiento, la música, el arte, la creatividad, la fe, etc.

He leído atrocidades que se han hecho en la Rusia comunista con personas que fueron torturadas por el solo hecho de creer en Dios, eran espiados, acusados, difamados y encarcelados por no pensar igual.

Nadie podrá quitarme mi manera de pensar, por que hubo factores en mi vida que me formaron cómo persona y que fueron cómo tejiendo la esencia de mi ser, y eso no tiene precio, me podrán persuadir; pero eso será si mi alma así lo quiere; pero ningún poder tiene la facultad de doblegar al ser humano para que crea, piense o actúe de alguna manera contraria a su esencia.

Los gobiernos que tienen esta tendencia, sin que pongan un cartel diciendo: "Democracia se vende" en realidad hacen sus ofertas con total sutileza, te doy, o no te doy. Si pensás cómo piensa el gobierno; te doy, si pensás distinto, no te doy.

Por otro lado, cuando el gobierno avasalla a todos los medios de prensa y a las claras hostiga a quienes tienen otras ideas, nos guste o no, si los votamos; votamos a un gobierno que el día de mañana se meterá también, con nuestra propia libertad de pensamiento, nos guste o no.