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Envuelto en un sonado enfrentamiento con Ángel de Brito, Martín Liberman volvió al " Bailando por un sueño ". Con su bailarina titular (Marcelo Greco, su esposa) aún lesionada, el periodista se presentó con su compañera suplente. Pero más interesado en pelear que en bailar, Liberman arremetió fuerte y dijo que Ángel es un capo porque sabe cómo contestar, y que sabe jugar con la ironía, a lo que el jurado dijo "se lo agradezco porque tiene razón". Sobre su pelea con José María Listorti, Martín ratificó que lo considera un "alcahuete", y avivó el fuego comentando que en la vida hay dos maneras de hacer periodismo: "o sos Polino o sos de Brito", y que él se reconoce en Polino, ya que Marcelo siempre dice la verdad. Sin dar señales de fatiga, el pelirrojo también le dedicó un round a El productor enmascarado, porque al parecer, en Este es el show siempre recibe fuertes críticas.
En la devolución, Ángel dijo que el baile "no le gustó nada, y que el trabajo fue mediocre" (1). Carolina "Pampita" Ardohain mencionó que el ritmo del cuarteto no lo favoreció (7). Moria Casán le sugirió a Liberman que se convierta en una "pirámide de vaselina" para que así todo le resbale, porque esa energía negativa no es bueno que se vuelque al baile (6). Soledad Silveyra compartió la opinión de sus compañeros y alentó a Martín a seguir trabajando (voto secreto), y Marcelo Polino cerró resaltando que la tanta pelea no termina de jugarle a favor (3). Con 17 puntos en total, Martín Liberman se lleva de ese modo el puntaje más bajo de la ronda.
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