La fiesta del Bicentenario Argentino se vivió en paz, lo que verdaderamente hace lo que significa este pueblo; que vive en paz y ama la paz.

Millones de personas recorrieron las calles de la ciudad en medio de festejos inolvidables, millones de banderas y cintas celeste y blanca, colores que, cómo decía Sarmiento, significan; amar la paz.

Un pueblo que dice a gran voz a sus dirigentes, en el silencio de su alegría: "Merecemos ser gobernados con grandeza", un pueblo que solo quiere trabajar, crecer, educar.

Iniciar una nueva etapa en unidad, dejando de lado la fatua confrontación, el mero egoísmo y la ambición de poder.

Allí estuvieron presente los ojos de Chavez, presidente de Venezuela, los ojos de Lula, presidente de Brasil, los ojos de Mujica, presidente de Uruguay, y en total siete presidentes Latinoamericanos, sin descartar la mirada de Kirchner, ex presidente argentino. ¿Que conclución sacaran?

¿Que pensaran? el pueblo: ¿Es pueblo soberano, o es masa? Ellos rendirán cuenta de sus actos, mientras tanto la gente disfruta, que han pasado doscientos años de aquella ves, que un puñado de criollos salieron, allí, en ese mismo lugar y dijeron basta "Queremos un cabildo abierto"