Los pediatras recomiendan que los hijos duerman en su cama y por lo menos 7 horas de corrido ya que un buen descanso favorece a su crecimiento mental y físico.

El problema es cuando tu hijo no se duerme en su cama sino en la cama de los padres y a media noche lo pasamos a su cama, se despierta y vuelve a empezar, al final nadie descansa.

Es por eso que te damos un buen método para que esto cambie y 100% efectivo, funciona muy bien en equipo y en una semana todo esto volverá a la normalidad, solo necesitas dos cosas ser constante y mucha paciencia

Son siete días de sacrificio y muy pronto todo estará en su lugar, chicos felices y papas también

Un baño antes de comer los relaja, apagar las luces de la casa, disminuir los ruidos, todo como para ambientar a la noche, se ponen el pijama, se lavan los dientes y a la cama, ahí leemos un libro, contamos una historia cantamos alguna canción suave, le damos a elegir si desea un juguete, no más de uno , como para que se sienta seguro, no es para que juegue; Le damos un beso y hasta mañana. Nos retiramos del lugar y esperamos afuera unos minutos, por supuesto que el estará a los gritos llamando, peor ahí seremos fuertes y esperamos, volvemos a entrar le damos un beso y a hasta mañana, y nos volvemos a ir, esperamos afuera unos minutos esta vez un poquito mas que la anterior y volvemos a entrar, en el caso de que sea muy necesario se lo levanta se lo abraza para que se reconforte y un beso y a la cama, así una y otra vez, hasta que se duerma de cansancio.

Estas semanas estarás despierta, caminando todo la noche, hasta que se duerma el solito, al finalizar la misma él ya sabrá sus límites y si necesitara de mamá o papá sabe que estarán ahí para cuando llame, es un proceso difícil, pero efectivo. Son siete días de sacrificio, generalmente es lo que tardan en acostumbrarse y muy pronto todo estará en su lugar, chicos felices y papas también.