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Estudios demuestran que los calores de la menopausia se relacionan con bajas tasas de cáncer de mama y menos probabilidad de sufrir ataques cardíacos
En Colombia, aproximadamente un 18% de la población femenina tiene 40 años o más, lo que supone cerca de 7.500.000 de mujeres. Con una expectativa de vida que ronda los75 años, esto quiere decir que las colombianas pasan más de un tercio de sus días después de experimentar el climaterio o menopausia, una etapa natural de la mujer que conlleva cambios físicos y emocionales.
¿Qué pasa en mi cuerpo?
Las cantidades de hormonas que produce una mujer varían con los años. A los treinta, se producen menores cantidades que a los veinte y, para los cuarenta, esos niveles descienden aún más, iniciando la primera etapa del climaterio, conocida como perimenopausia.
Entre los síntomas a corto plazo asociados con esta etapa: piel seca, sensación de ardor en el cuerpo, mareos, dolores de cabeza, entre otros, el calor, vapor o bochorno, es uno de los más comunes. De hecho más del 50% de las mujeres sienten calores en el climaterio. Físicamente se experimenta una sensación repentina de sofoco; la cara y el cuello suelen sonrojarse o aparecen manchones rojos en pecho, espalda y brazos. Esta sensación puede ir acompañada por sudor intenso e incluso escalofríos generados por el mismo cuerpo al tratar de ajustar la temperatura. Lo molesto es que ocurren en cualquier momento del día, inclusive mientras se duerme, y pueden durar de 5 a 30 minutos. Para aliviarlos, la industria farmacéutica ha desarrollado productos diseñados especialmente para ese síntoma. En su establecimiento de confianza encontrará pañuelos refrescantes húmedos con Aloe Vera, que pueden ser usadas para refrescar su cuello, rostro y pecho durante las oleadas de calor de manera discreta y eficiente
En el mercado existen pañuelos refrescantes diseñados especialmente para ser usados para refrescar su cuello, rostro y pecho durante las oleadas de calor de manera discreta y eficiente
Sin embargo, estos calorones no son tan malos como se cree. Recientemente, científicos del Centro de Investigación sobre el Cáncer Fred Hutchinson de Seattle, Estados Unidos, demostraron en un estudio publicado en la edición en línea de 'Cancer Epidemiology Biomarkers and Prevention’, que las mujeres que sentían la mayor cantidad de sofocos tenían menor riesgo de desarrollar cáncer de mama.
Otro estudio estadounidense publicado en la revista Menopause, estableció que las mujeres que padecen sofocos y sudores al inicio de la menopausia podrían tener menos probabilidades de sufrir un ataque al corazón que aquellas mujeres que desarrollan estos síntomas más adelante.
Y un último dato muy significativo: Más allá de las consecuencias físicas y psicológicas inevitables (y naturales), la práctica médica ha demostrado que la experiencia del climaterio puede ser completamente diferente de unas mujeres a otras, incluso con síntomas muy similares en variedad e intensidad. La actitud que tome cada mujer al atravesar esta etapa marca la diferencia entre un climaterio tormentoso o una etapa dominada por la introspección y el crecimiento personal.
Las mujeres que experimentan mayor cantidad de sofocos, tienen menos riesgo de desarrollar cáncer ce mama