El Buque Insignia del deporte cubano sufrió otra vía de agua al perder este domingo a una de sus mejores cartas, el campeón mundial peso ligero Lázaro Álvarez, derrotado por el brasileño Robson Conceiçao en semifinales del boxeo de Rio-2016.

Conceiçao tomó desquite de la derrota sufrida por el cubano en la final del Mundial de Almaty-2013 y se llevó una votación unánime (3-0) que le asegura su pase a la final de la división, el próximo martes.

"Fue una gran victoria ante uno de los mejores del mundo", señaló Conceiçao, quien terminó con una herida superficial encima de la ceja derecha.

"Todos los boxeadores llegaron bien preparados, pero yo acredito mis triunfos a que estoy un poquito mejor entrenado que los demás", manifestó el púgil de 27 años.

Conceiçao, con experiencia en tres Juegos Olímpicos y cuatro Mundiales, se mide en la final del martes contra el francés Sofiane Oumiha, ganador unánime sobre el mongol Otgondalal Dorjnyambuu.

Los tres jueces le dieron tarjetas ganadoras de 29-28 al local, que peleó arropado por el apoyo de su público, en lo que ha sido la pelea más emotiva del torneo hasta la fecha.

"Casi ni me dio. Lo único que él estaba peleando en su barrio y por eso los jueces le dieron la pelea", declaró un compungido Alvarez.

"El mundo entero sabe, si vio la pelea, que yo gané, que Lázaro Álvarez ganó. Me sigo sintiendo el mejor", añadió.

El brasileño se basó en ataques desordenados y golpes abiertos, con los que logró conectar varias veces a la cara del cubano, que en los tres intercambios más furiosos pareció sacar mejor parte.

"Fue injusto. Acá todos los boxeadores tienen un nivel parejo, pero yo creo que estoy un poquitico por encima de los demás", subrayó el cubano.

Este es el cuarto púgil que pierde en el certamen la escuadra cubana, que llegó a Rio con intenciones de recuperar el primer lugar del medallero olímpico del boxeo, del que ha sido desplazado en los últimos dos Juegos.