Probablemente, buena parte o todo de lo que vamos a aportar en este artículo relativo a unas operaciones tan habituales en nuestras cuentas bancarias como los traspasos y las transferencias, ya es conocido por usted, sin embargo, nos parece interesante esta compilación de cuestiones comunes y acciones también comunes en un producto como las cuentas, por cuanto, a veces pueden surgir determinadas dudas que tienen una solución realmente sencilla.

Obviamente un traspaso no es lo mismo que una transferencia, de la misma manera que un préstamo es un producto diferente a un crédito aunque a veces utilizamos indistintamente a más palabras para definir un único producto, puede ocurrir que confundamos un traspaso con una transferencia, y sin embargo como veremos no son iguales, de hecho son dos acciones totalmente distintas.

La Transferencia es una transacción que se va a realizar entre cuentas situadas en diferentes entidades financieras, y este hecho es independiente de que se trate de cuentas de un mismo titular, mientras que el traspaso será la operación que va a permitir realizar movimientos de dinero entre dos cuentas pertenecientes a una misma entidad, independientemente de que se haga entre cuentas del propio titular o a otro titular.

Las características de cada acción definen realmente bien como se trata de dos cuestiones diferentes, por ejemplo, los traspasos serán instantáneos y efectivos en el mismo momento de su realización, ya que se trata de operaciones internas dentro de la misma entidad, sin embargo las transferencias no podrá ser instantáneas nunca, y dependiendo de las entidades (por ejemplo el caso de transferencias entre entidades nacionales) tardarán entre 24 y 48 horas incluso más en hacerse efectivas.

Otra cuestión que separa de manera clara ambas acciones es la aplicación de comisiones. En el caso de los traspasos, esta acción en principio no debiera suponer ningún tipo de gasto para el usuario al menos entre cuentas propias, sin embargo, las transferencias suelen generar comisiones excepto en aquellos productos que específicamente renuncien a ellas a la hora de su contratación, productos que, efectivamente, cada vez encontramos en mayor medida, pero sin embargo, insistimos, en principio las transferencias si presentan costes.