Ya hace años en este mismo blog hablábamos de la experiencia que se iniciaba en Francia de una cuenta que no se comercializaban bancos, sino en comercios como estancos, o incluso restaurantes, y que pretendía ser un antídoto contra la exclusión bancaria.

Lo cierto es que con el estallido de las cuentas por Internet y la facilidad de contratación de este tipo de productos, pareciera que productos como la cuenta Nickel han desaparecido del mercado, pero ni mucho menos, y, de hecho, continúa siendo un producto interesante sobre todo para entornos en los que la inclusión bancaria es compleja. Pensemos que la reorganización bancaria hace que cada vez haya menos sucursales y que pueda ser complicado para personas poco acostumbradas a Internet, utilizar un producto como una cuenta sin acceso a las sucursales.

Como su propio nombre indica se trata de una cuenta que no necesita ser contratada en entidades bancarias. La cuenta, se cuenta perfectamente autorizada en el banco de España ya que, detrás de ella tiene el respaldo de una entidad financiera como BNP Paribas.

Se puede contratar en puntos como establecimientos de venta de tabaco y loterías, e incluso, en otro tipo de establecimientos. La contratación es rápida y se realiza con el documento de identidad en el mismo comercio, no es necesario ningún proceso posterior.

Las principales características de esta cuenta son:

1. Tener IBAN español
2. Poder utilizar la cuenta cómo herramienta para domiciliación de pagos y recibos, también de cobros
3. Poder realizar transferencias en la zona SEPA sin costes añadidos
4. Acceso a una tarjeta MasterCard de débito con lo cual también tendrá acceso a los cajeros automáticos y los sistemas de pago que acepten MasterCard
5. Acceso a una aplicación para dispositivo móvil y plataforma de banca por Internet para el control de cuentas

La cuenta tiene un coste anual de 20 €, y mantiene una política transparente de costes, con lo cual, es un producto realmente sencillo de comprender y de contratar. Dispone de un servicio de atención al cliente castellano que se mantiene activo todos los días del año.

Se trata de un tipo de cuenta que facilita la inclusión bancaria. En un momento en el que la reorganización bancaria hace que cada vez haya menos sucursales, pero también, en qué por condiciones de producto, sea más difícil para muchas personas acceder algo tan básico como tener una cuenta bancaria, este tipo de propuestas facilitan y acerca de manera más universal un producto financiero tan básico como este.

Recordemos, que hoy en día, tener una cuenta bancaria es una exigencia para cuestiones como contratar suministros, realizar domiciliaciones de ingresos, etc., por tanto, la inclusión bancaria es una de las luchas sociales a tener en cuenta y, este producto participa en ella, del mismo modo que lo hace la cuenta de pago básica, pero, sin embargo, la cuenta de pago básica requiere de una sucursal bancaria, mientras que la cuenta Nickel no.