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Ante situaciones que te causan gran malestar o personas que te desestabilizan emocionalmente; ¿Cuánto darías por poseer eficaces herramientas que te permitan conservar la calma? En este artículo te muestro una de ellas
Seguramente te has encontrado ante situaciones que no puedes cambiar y que te causan un gran malestar porque van en contra de tus creencias, de tus deseos y de tu manera de ver la vida.
También estoy seguro que te has encontrado con personas que te han agredido verbalmente y te han desestabilizado emocionalmente.
En esos momentos, ¿cuánto darías por poseer eficaces herramientas que te permitan conservar la tranquilidad?
¿Por qué son altamente valiosas estas herramientas?
Porque la felicidad genuina se alimenta de la calma.
Es muy difícil que haya felicidad permanente en un corazón agitado.
Y la calma solo es propiedad de una mente fuerte, y para que una mente sea fuerte tiene que ser flexible.
Por esta razón en este artículo te explico la relación entre la flexibilidad y la fortaleza mental y te brindo un ejercicio que te ayuda a desarrollar esa flexibilidad para que “no te entren ni las balas” (como decimos en nuestro país).
Ante todo, debes saber que ser flexible es ser fuerte.
La cultura oriental considera que la espiga de trigo es más fuerte que el roble porque ante un viento fuerte o una tempestad el roble puede quebrar fácilmente por su rigidez, pero la espiga de trigo prevalece gracias a su flexibilidad.
Cuando pasa la tormenta: ¿Quién demostró ser más fuerte?
La rigidez y la falta de flexibilidad son acompañantes de la enfermedad tanto física como mental.
Las personas que se dedican a dar masajes saben cuán de rígido puede estar un cuerpo solo de tocarlo. Palpas las diferentes partes del cuerpo y la sientes como de mármol.
Esta rigidez corporal es solo una manifestación de la rigidez mental.
Una persona con rigidez mental no se puede relajar por muchos masajes que reciba. Lo masajeas, pero al cabo de una hora su cuerpo comienza otra vez a contraerse, a encogerse.
Sobre la rigidez mental ya te he comentado en otros artículos (recuerda la llamada “parálisis de paradigmas”), por eso solo quiero recordarte una historia que ilustra esto elocuentemente.
Existió en la antigüedad un fanático rey tenía una preciosa cama de oro, muy valiosa, adornada con miles de diamantes y siempre que había invitados en palacio él les ofrecía la cama.
Pero existía una condición: el invitado tenía que encajar en la cama. Si el invitado era un poco más largo, el rey lo hacía cortar al tamaño adecuado. Si era más corto que la cama, el rey tenía profesionales que le estiraban hasta dar la talla.
Por supuesto que como la cama era tan valiosa no podía ser modificada, pero el invitado sí podía ser modificado.
El invitado moría, pero el rey no tenía la culpa, él lo hacía todo con la mejor intención del mundo y sufría mucho al ver que casi nadie encajaba en su cama.
¿Tú cama mental también es de oro?
Entonces te aconsejo que la cambies por una cama de agua.
¿Por qué?
Porque en el mundo no hay nada tan flexible, pero a la vez tan fuerte que el agua. Y eso se debe a que ella es blanda y deslizante.
Pensamos que ser blando es una debilidad porque toda la sociedad nos incita a cultivar un ego fuerte, pero te digo que es todo lo contrario.
¿Por qué?
Porque mientras más fuerte es tu Ego, más rígida es tu cama mental y más engañado vives creyendo que eres el centro del universo y que son los demás los que tienen que adaptarse a tus modelos.
La calma solo es propiedad de una mente fuerte, y para que una mente sea fuerte tiene que ser flexible
Sin embargo, cuando imitas las cualidades del agua, cuando se requiere, puedes ser lo suficientemente penetrante para taladrar el metal y la piedra, pero sin excesos ni carencias en tu interior.
Cuando tienes una mente flexible careces de Ego.
¿Qué es carecer de Ego?
Justamente como el agua;
Lo que de verdad debes recordar es que la flexibilidad es la capacidad de moverte de un extremo al otro en el amplio espectro de las relaciones sociales; en una total relajación.
Cuando entiendas que lo más blando del mundo vence a lo más duro del mundo comprenderás que lo que se necesita es fluir con la vida precisamente como lo hace el agua.
Cuando el agua se encuentra con un obstáculo que no le permite fluir no ofrece resistencia. Sencillamente busca otra vía para seguir fluyendo.
Quienes vencen a los más fuertes mediante la flexibilidad tienen un poder que no puede medirse.
Por ello cuando un árbol es fuerte, se quiebra; cuando el cuero es fuerte, se agrieta; los dientes son más fuertes que la lengua, pero son los primeros en morir.
Así pues, la flexibilidad y la aceptación son los administradores de la VIDA.
La dureza y la resistencia son los embajadores de la MUERTE.
Además, es cierto que el agua es flexible, blanda, no obstante nadie puede vivir y ninguna obra puede ser llevada a cabo sin ella.
Sé que ya tienes probadas evidencias del por qué debes cultivar la flexibilidad mental para ser fuerte, por eso pasemos al prometido ejercicio.
EL EJERCICIO.
Este ejercicio consiste en sentir como si te estuvieras volviendo transparente en las cosas que te suceden, como si no tuvieras la solidez de un cuerpo material.
Permite que el ruido, o cualquiera que sea la causa de tu malestar te atraviesen, como si no hubiera ningún órgano de los sentidos que pudiera captar esos estímulos como si golpearan en tu interior.
En lugar de tener un muro de resistencia dentro de ti utilizando los órganos de los sentidos para seleccionar qué entra, deja que todo te atraviese porque sientes que no tienes consistencia alguna.
Imagina que alguien te dice algo grosero o con intención de molestarte. En lugar de caer en la reacción inconsciente y en la negatividad, en lugar de atacar, ponerte a la defensiva o retirarte, deja que las palabras te atraviesen limpiamente. No ofrezcas resistencia. Es como si ya no hubiera nadie que pudiera sentirse herido.
Créeme es así como te vuelves invulnerable.
Puedes decirle a esa persona que su conducta es inaceptable, si eso es lo que eliges, pero esa persona ya no tiene el poder de controlar tu estado interno. Entonces realmente eres dueño de ti mismo, no estás bajo el poder de otra persona o de las circunstancias.
Si lo practicas verás que tu Ego se irá debilitando y serás atrayente como el agua porque te conservarás calmo y dichoso.
Por cierto, me gustaría y me ayudaría mucho el conocer tus experiencias con relación a la práctica de este ejercicio, así que hazme saber tus comentarios.
Termino con la siguiente reflexión:
Los frutos de la flexibilidad y la aceptación son un corazón calmado y una mente fuerte.
MUCHAS GRACIAS.