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El equipo alemán es consciente de que el W14 no es el mejor en la parrilla del 2023 de Fórmula
El director del equipo Mercedes, Toto Wolff, produjo duras críticas al W14 tras ver la realidad del primer Gran Premio de Bahrein de 2023 y calificó el fin de semana como nefasto desde que está en el equipo, una auténtica catástrofe que repercutirá a la organización alemana. Los germanos parecen haber cometido el error de haber continuado con el mismo concepto del W13 de ir sin pontones, algo que para el austriaco debía cambiar.
Sin embargo, elogió al equipo Aston Martin, y afirmó que solo podía "quitarse el sombrero ante ellos" puesto que "han ganado dos segundos en seis meses y su coche es en parte mitad" del W14, motivado a que tienen la misma mecánica, caja de cambios, motor y suspensión trasera, además que también comparten el mismo túnel de viento, con lo que reconocieron que han de mejorar.
Wolff no sitúa el énfasis en la mecánica, sino en el rendimiento aerodinámico: "Sabemos que no tenemos un problema mecánico; si lo tuviésemos, Aston Martin también sufriría. La cuestión es que en las rectas vamos bien, pero perdemos mucho tiempo en las curvas rápidas".
En lugar de alcanzar al equipo de la bebida energética, los teutones han visto como los de verde les abanten en pistan sin problemas, con lo que ahora son el cuarto equipo en la actual parrilla de este recién empezado campeonato, mientras tanto el equipo técnico encabezado por Mike Elliot está bajo presión. El británico tiene el apoyo del jefe, pero hay una fuerte ruptura evidente a la hora de tomar decisiones con respecto al monoplaza de 2023.
Equipo Mercedes
Así como, James Allison parece tornar a la carga y habría comenzado en la mejora, que aún se espera que llegue para la cita en el circuito de Imola, bajo la supervisión de Riccardo Musconi, aunque hay muchos aspectos a tratar. Uno de ellos es la evidente falta de carga aerodinámica, la velocidad punta no está nada mal, dado que Lewis Hamilton alcanzó los 324, 4 km/h, un poco más que el piloto de la pole position, Max Verstappen, y 2, 2 km/h más que el Ferrari de Carlos Sainz. Además, el siete veces campeón del mundo rozó los 333, 4 km/h en la carrera, mucho mejor que los Red Bull, teniendo estos datos es obvio que ese no es el problema.
El máximo responsable del equipo Mercedes, ha descartado la posibilidad de que los contratiempos vengan de la zona trasera del monoplaza, e insinuó que siguen teniendo al piloto sentado en un cockpit más adelantado que el resto de los demás equipos. No solo eso, sino que los laterales, con sus estrechas y altas salidas de aire del radiador, con un aspecto casi triangular, no convencen.
Las turbulencias de la rueda delantera se pegan a la carrocería del coche, a pesar de la presencia de un llamativo bargeboard, y contaminan los flujos de aire que, en cambio, deberían ayudar a formar la 'minifalda neumática' necesaria para sellar el fondo plano del coche con el asfalto, creando el efecto suelo en los túneles Venturi, ademas el alerón central que cubre el cono superior anti-intrusión y da soporte los retrovisores es muy diferente al W13 del coche del año 2022, puesto que ahora parece un componente del chasis con una mínima separación, pese a que las entradas del radiador se han movido hacia atrás, necesariamente para alejarlas del neumático delantero y atenuar los efectos de las turbulencias generadas por estos.