Frente a la embestida del gobierno argentino contra Fibertel, de caducarle la licencia por que pertenece al grupo Clarín, en una demostración más del atropello de los Kirchner al estilo chavizta, mucha gente se expreso mostrando la bronca y el descontento de un gobierno que cada día abre una nueva puerta a la confrontación.

El descontento de la gente no le molesta al gobierno, esta demostrado por su indiferencia ante los reiterados reclamos justos de la gente, ejemplo: La inseguridad, no existe discurso, ni cacerolas, ni movilización que inquiete a un gobierno experto en confrontaciones, y que no se le ha escuchado una sola palabra a la presidenta para dar tranquilidad a la gente que sufre los robos, los asaltos y la pérdida de sus seres queridos, durante todo el período de su mandato.

Parece que día día se le suma a la gente una gota que desborda el baso de la tolerancia, solo quienes reciben planes sociales, subsidios o participación en la gesta política de los Kirchner, opinan alguna cosa a favor o quienes simpatizan con una política progresista y ven en los K alguna pizca de esperanza para sus ideales políticos.

No pasa lo mismo con el grueso de la gente, que sufre en silencio una especie de castigo por no ser de ideales omogéneos con la política del actual gobierno.

Los meses que restan pertenecen a una recta que es crucial para el gobierno, y la intolerancia los enceguece de tal modo que están cavando su propia tumba, el atropello del secretario Moreno con su habitual patoterismo, los discursos agresivos de Aníval Fernandez, el mismo Nestor que no hace más que embarrar la cancha y manejar una política sucia, corrupta y maliciosa.

Esas cosas la gente las ve, el intento de pretender hacer callar a los medios es una muestra más de una locura que ellos no pueden ver por si mismos, ni tampoco aceptan concejos u opiniones contrarias por lo que no podrán ser ayudados por nadie, pues quien no piensa igual es considerado un traidor, de modo que sus propios consejeros los traicionan por no decirles que esas cosas a la gente no le gusta, la gente quiere escuchar radio, ver televición o leer el diario con total libertad, y decidir por si mismas que diario leer o que medio escuchar cómo personas adultas.

Esta recta final es el fin de los Kirchner y ellos lo persiben de ese modo e intentan sacar un conejo de la galera, o cualquier cosa menos cambiar, menos aceptar que todo el camino recorrido a sido un terrible error que se pagará en las urnas con una derrota que quizá sea historica.