Cuando hasta hace unos días se hablaba de un enfrentamiento entre Israel y EE.UU. contra Irán la rueda de la guerra comienza a girar, además teniendo en cuenta que el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas al igual que hizo en Libia ya pidió "ayudar" recibiendo el veto de Rusia, la noticia de que un destructor y un barco de suministros irançi atraco en el puerto de Tartus caera como un balde de agua fria.

La gravedad de la noticia consiste en que de ahora en más cualquier intervención de la OTAN, en Siria para ayudar a los rebeldes seria tomado casi como una declaración de guerra, a Irán.

Los dos buques de la Armada iraní que han atracado en el puerto sirio de Tartus, según el sitio estatal irani Press.tv son para proporcionar formación marítima de las fuerzas navales de Siria en virtud de un acuerdo firmado entre Teherán y Damasco hace un año.

La flota iraní, que consiste en un destructor y un barco de suministro, llegó al puerto de Tartus, situada a 220 kilómetros (136 millas) al noroeste de la capital siria, Damasco, el viernes un día después de haber recibido el permiso de las fuerzas armadas egipcias para navegar por el Canal de Suez Canal en el Mar Mediterráneo en su camino a la costa siria, Mehr News Agency informó el sábado.

Por último el sitio digital iraní destaca que las fuerzas navales de esa nación ha incrementado su presencia en aguas internacionales desde el año pasado, el despliegue de buques en el Océano Índico y el envío de dos barcos en el Mar Mediterráneo para la primera vez en febrero de 2011 a través del Canal de Suez.