"Se le va la vida" ©

Sentado en su viejo sillón, esperando el último tren de la vida;

los recuerdos se le borran, y el alma se le ilumina.

En su rostro se reflejan, los sucesos del pasado;

y sus manos le delatan, por todo el arduo trabajo.

Tiene el corazón cansado, la sonrisa un tanto tibia;

como si se diera cuenta, que ya se le va la vida.

Con el alma desgarrada, y la mente deprimida;

sólo piensa en el pasado y sus ojos ya no brillan.

Recuerda esos momentos, en que el tiempo no transcurre;

cuando todo es tan valioso, y el silencio se interrumpe.

Ahora ya nada le importa, su mirada está vacía;

se ha ocultado en el olvido, su tristeza la domina.

Lo que piensa es un misterio, con muy pocos lo comparte;

no se mira en el espejo, tiene miedo de no hallarse.

Las prisas ya no le agobian, lo que le sobra es el tiempo;

y si algo le preocupa, él lo esconde en el silencio.

Cada día es un regalo, y como tal se lo toma;

sabe que le queda poco, y de vez en cuando llora.

Tiene el corazón cansado, la sonrisa un tanto tibia;

como si se diera cuenta, ¡que ya se le va la vida!