El Dr. Erik Diaz, a cargo de la Escuela de Nutrición y Dietética de la Universidad de Chile, junto a un grupo de investigadores, realizó una investigación sobre 1500 individuos de entre 18 y 65 años y comprobaron que el 80% tenía una condición física mala o deplorable, así comenta el inicio de la página principal de mi ordenador en una de sus noticias.

No me cabe duda que de haber sido parte del estudio estaría cómodamente incluida dentro de ese 80%, no sé si alegrarme por estar dentro de la mayoría por una vez en mi vida o ponerme a llorar por lo lamentable de mi futuro según el informe.

En toda mi vida los ejercicios más intensos los he realizado con mis dedos, el índice para pasar las hojas de los libros que leía y actualmente para manejar el mouse, aquí ya con la intervención del dedo mayor…y el resto de ellos para acariciar las teclas que me permiten escribir estas palabras como tantas otras diariamente.

Cuando yo era más joven, mucho más joven que ahora, otros eran los parámetros, recuerdo que los muchachos más codiciados por nosotras eran flacos, lánguidos, barbudos, si con anteojos mucho mejor, la pinta de intelectuales nos mataba!!!

Por otro lado las chicas, emulabamos a Twiggy, yo usaba unos sweters muy holgados y los hombros caídos, pues me avergonzaba la pechera con

que la madre naturaleza me había dotado, se usaba la chatura total!!!

Los gimnasios ni pintaban.

Hoy cuando veo esos cuerpos esculturales en los jóvenes, ya sean muchachos o chicas, trabajados tras horas de sudor, exhibidos con orgullo, quedo boba lo aseguro. Me parecen magníficos

...la Mona Lisa actualmente no sería aceptada en ningún casting

Pero claro, todo es cuestión de épocas, me imagino que la Mona Lisa actualmente no sería aceptada en ningún casting.

Volviendo al ejercicio, parece que según esta investigación estoy condenada a la atrofia y a la grasa, vaya futuro el mío, no me va la gimnasia, correr, ni hablar, ni siquiera caminar!!!

Me compré una bicicleta fija y, como decía una graciosa propaganda, “fija que queda como perchero”, no quedó como perchero, pero luce graciosa al costado de mi cama debajo de la ventana, inútil y poco decorativa, la usé sólo cinco minutos, no les miento, sólo fueron cinco minutos, la tengo hace más de seis meses.

Aquí en Buenos Aires, capital, la gente es muy dinámica, es usual ver durante todo el día gente corriendo, con ropa deportiva, con sus audífonos escuchando vaya uno a saber que de esos aparatitos que pasan música o noticias.

En lugares donde hay verde, tomemos como ejemplo los parques de Palermo, hacen precalentamiento, estiramiento, todo muy prolijito, a veces van de a dos o de a tres, pero en general la cosa es individual, desde jovencitos/as a gerontes, cada uno a su ritmo.

Realmente admirable.

Pero a mi no me va, antes lo intenté, muchas veces y siempre lo abandoné, no es lo mío, ni siquiera me genera endorfinas!!! He llegado a jugar tres partidos de tenis seguidos y salir con el mismo mal humor con el que entré a la cancha, porque no me gustaba!!!! Aún cuando salía triunfadora….

Pues bien, Sr. Dr. Erik Diaz, ha hecho Ud. un trabajo estupendo, ayudará a muchísima gente, no lo dudo, pero conmigo… no cuente!!!