Val d'Isère y Courchevel, las pruebas de la Copa del Mundo de esquí alpino programadas para el 13 y el 14 de diciembre, solo tienen un hilo de esperanza de organizar los eventos a causa de la falta de nieve, informaron este jueves fuentes de la organización.

La Federación Internacional de Esquí (FIS) acordó darles de margen hasta el viernes para dar su previsión de nieve, prevista inicialmente para este jueves.

Las dos estaciones de Saboya deben celebrar las pruebas de eslalon gigante y eslalon, los masculinos, en Val d'Isère, y los femeninos, en Courchevel. Los organizadores se agarran a las "bajas temperaturas anunciadas para los próximos días", que permitirían a los cañones de nieve fabricar el polvo blanco. En Val d'Isère, también esperan "viento del este para este fin de semana", sinónimo de nevada.

"La decisión se tomará el viernes tras la visita del controlador de la FIS. Hemos puesto todos los medios, con dos productores de nieve más en la pista", indicó a la AFP Michel Raffin, presidente del club de deportes de Courchevel.