INVESTIGACIÓN / 1 de septiembre de 2011 - 10:50 / Por Centro de Redacción Ponen la lupa sobre la familia de Candela> Tweet {lang:'es-419'}

El fiscal de la causa ya tomó declaración al padre de la niña y tiene previsto hacer lo mismo con la madre. El llamado extorsivo que recibió una de las tías despertó sospechas.

Mientras que suceden escenas de profundo dolor en el barrio Luna de Hurlingham, donde vivía Candela Sol Rodríguez, la Justicia decidió poner la lupa sobre la familia de la niña, en medio de fuertes sospechas de que su secuestro y posterior asesinato pueda deberse a un ajuste de cuentas del asesino con algún miembro del entorno directo de la nena, cuyo cadaver apareció ayer tirado en una colectora del autopista del Oeste.

Fuentes judiciales y policiales informaron a la agencia Noticias Argentinas que, en medio de este cuadro de situación, el fiscal Federico Nieva Woodgate tenía previsto indagar en las próximas horas a Carola, la madre de Candela, luego de haber tomado declaración en calidad de testigo al padre de la niña -quien cumple una condena en la cárcel de Magdalena- durante buena parte de la madrugada de este jueves.

Las sospechas de los investigadores sobre la familia de Candela incluyen a una de las tías de la niña, quien recibió días pasados un llamado extorsivo para que entregara dinero a cambio de la liberación de la nena, que a esa altura ya llevaba una semana en condición de desaparecida.

El hecho de que el cuerpo de Candela haya sido tirado en Hurlingham, a sólo 30 cuadras de la casa familiar, también despierta sospechas entre los investigadores, quienes apuntan la pesquisa a una actividad desarrollada por la familia de la nena, tras recibir el testimonio de vecinos que pidieron reserva de identidad.

Más allanamientos. Mientras tanto, personal de la Policía Bonaerense realizaba varios allanamientos en Hurlingham, entre ellos una casa abandonada, en busca del lugar donde estuvo cautiva Candela. Fuentes policiales informaron que la vivienda está ubicada en la calle Kiernan al 900, a sólo un kilómetro de la vivienda de la nena asesinada, en esa localidad del oeste del Gran Buenos Aires.

Según trascendió, vecinos del barrio confirmaron que el inmueble lleva deshabitado varios años. A su vez, los restos mortales de Candela eran velados esta mañana en una casa funeraria del partido bonaerense de Hurlingham.

El velatorio se lleva a cabo desde la 5:30 en la Casa Lizardo, en avenida Vergara al 3300, de Hurlingham, donde ya se encuentran su madre, Carola Labrador, y su padre, Alfredo Rodríguez, quien fue trasladado desde el Penal de Magdalena, donde está detenido desde hace un año y medio. El velatorio se extenderá hasta las 14:00 y se espera que participen familiares, amigos y vecinos de la pequeña asesinada.

La autopsia. Candela Rodríguez fue asfixiada, según lo reveló la autposia realizada por peritos forenses. Fuentes policiales confirmaron que Candela sufrió ‘ asfixia mecánica’ , que le provocó la muerte, pero aclararon que no había ‘ signos de violencia corporal’ , tal como se había informado en un primer momento.

Además, la autopsia reveló que la niña fue ultimada entre 36 y 48 horas antes del hallazgo de su cuerpo, es decir entre el lunes desde las 20:30 al martes a las 8:30.

El hallazgo. ‘ Me mataron a mi hija, por Dios’ , rompió en llanto la madre de Candela, la niña de sólo 11 años que fue hallada muerta en una bolsa de plástico sobre una colectora del autopista del Oeste y cuya desaparición había movilizado a los argentinos.

Carola, la madre de la nena, pidió que le abrieran la bolsa de plástico azul en la que dos horas antes una cartonera que merodeaba el lugar se había topado con el cadáver, y de inmediato la reconoció: ‘ Juro que esto no va a volver a pasar, no va a hacer más Candelas’ , gritó, en medio de una crisis nerviosa.

La dramática escena fue seguida de cerca por el gobernador de Buenos Aires, Daniel Scioli, y su ministro de Justicia y Seguridad, Ricardo Casal, a quienes los jefes policiales de la zona habían informado una hora antes del hallazgo del cadáver.

El cuerpo fue encontrado sobre una colectora del autopista del Oeste a la altura de Hurlingham, donde habría sido arrojado entre las 13.00 y las 16.00 de este mismo miércoles, según indicaron a la Justicia dos testigos que estuvieron en el lugar en horas del mediodía y que no vieron nada en ese momento.