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La casualidad, o quizá no, quizá fuera la Providencia para darme una lección de vida me puso ante un sepelio solitario
La prima Montse era la "cabra loca" de la familia de mi madre. Hija de un hermano de mi abuelo que emigró a Mexico, habia sido siempre una mujer de caracter, a veces, demasiado fuerte. tanto, que se plantó una vez y tra también ante las ordenes fuera de lugar de su padre, que quería tenerla atada pese a ser mayor de edad y dueña de su destino.
Yo la recordaba cuando ella y sus padres nos visitaban aqui en Barcelona, casi cada dos años. Luego...el paso del tiempo recluyó a los tios de mi madre en Mexico...la edad ...y las pocas ganas de viajar a su patria..en la que cada vez quedaban menos pareintes y amigos de su generación.
Montse, un día, harta del control paterno, tenia cuarenta y tantos....se volvió a Barcelona, buscó un trabajo y recobró sus raices. Era un caballo indómito. un día de verano, coincidiendo con la época mas turistica de Catalunya, conoció en Castelldefels a un ingles.....por lo visto fue un mutuo flechazo, o quien sabe si solo fue un espejismo de un amor de verano. Pero...lacosa progresaba así que en dos o tres meses, Montse se fue a Inglaterra donde contrajo matrimonio con su recién estrenado novio. Nadie de la familia catalana acudió al enlace, yo que entonces era un adolescente....hubiera ido de buen grado, para conocer mundo y pais. Pero no fui.
Por lo visto la convicencia fue tormentosa. no supe detalles. La versión oficial es que convivian con la hermana del marido...extremadamente mandona...con loc cual...el choque con Montse estaba anunciado de antemano. Al año de contraer matrimonio o quizas antes....ell regresó con los papeles de divorcio bajo el brazo.
Trabajó, fue independiente, con su caracter peculiar. Mi madre la invitaba con frecuencia a nuestra casa, tanto en verano como en invierno. Su mentalidad era peculiar, pero no le hizo ascos al trabajo, de cajera en un restaurante, de ama de llaves a un matrimonio bien posicionado, o de cuidadora de enfermos. El trato cons sus sobrinos y con su propia hermana cuando viajaban a España acababa siempre con alguna tensión.
Al final, en la vejez semantenia de una exigua pensión, redondeada por la aportación de una o dos chicas que habian venido a trabajar a España desde sudamerica, y que le ayudaban a pagar el alquiler y los gastos del piso, además de ofrecerle compañia-
Un dia, cayó de la cama. Hubo que ingresarla, y buscarle una residencia para que cuidaran de ella. Nos encargamos de las gestiones mi esposa y yo. Su familia mas allegada, pasó de ella.
Fue feliz en sus ultimos años, aunque quejandose siemre de todo, como había hecho duante toda su vida. Un resfriado madrugador en este otoño recien estrenado se la llevó al otro barrio. La enterraron el sabado. Nadie fue a su sepelio más que yo. Un entierro sencillisimo....caja de madera sin barnizar....un furgón cerrado la trasladó de la morgue al camposanto y los empleados del cementerio en veinticinco minutos cumleron coin su trabajo. Yo solo ante el nicho, acompañad e mi "Angel de la guarda" contemplé la escena.Musité una oración, , , , , y me despedí. Anoté en mi agenda el número del nicho.....y me fué a buscar el sol suave de otoño que bañaba aún el litoral de Barcelona.....necesitaba pasea a solas con mis recuerdos acompañado de mi Angel....que me hizo reflexionar al igual que el poeta "Que solos se quedan los muertos"