El Suelo laminado es una buena opción a la hora de agregarle un toque diferente a tu hogar. Pero debes saber que, con el tiempo, aún con un cuidado deficiente puede ir acumulando imperfecciones. Estas pueden ser tan pequeñas que hasta tú mismo puedes repararlas. Por esto hoy te hablaremos de cómo reparar daños leves en los suelos laminados.

¿Cuánto puede durar un suelo laminado?

La vida útil del suelo laminado dependerá totalmente del trato y del mantenimiento que le puedas dar. Aunque también de la calidad del suelo que compres y de sí el proceso de instalación se llevó a cabo de la manera correcta. Muchas personas piensan que no vale la pena colocarlo por la errónea idea de que dura poco tiempo.

Lo cierto es que con un buen cuidado y mantenimiento el suelo laminado te puede durar un tiempo para nada despreciable de entre 20 y 30 años, lo que lo hace un suelo duradero.

Además, si este tiene un mantenimiento riguroso y se sustituyen o se reparan los posibles daños que puedan surgir por accidentes o con el tiempo podrás alargar su vida útil casi indefinidamente.

Con buen cuidado y mantenimiento el suelo laminado te puede durar un tiempo

Cómo reparar daños leves en los suelos laminados

Desde arañazos por muebles, pasando por manchas que no salen de la lámina, hasta derrames, hacerlo brilloso de nuevo o sustituir un listón son problemas comunes que son fáciles de reparar en los suelos laminados si tienes los productos y herramientas adecuados para la tarea.

Aquí te diremos algunas técnicas que puedes hacer para reparar tú mismo este tipo de pavimento ligero:

• Tapar arañazos: Existen dos métodos que puedes usar, el primero es utilizando un rotulador reparador de madera. Es excelente para arañazos superficiales y viene de varios colores. El segundo método son las masillas o ceras para suelos laminados; estas se utilizan para reparar grietas o defectos que pueda tener las láminas, excelente para raspones más profundos.
• Quitar manchas: Para estos casos te recomendamos los limpiadores concentrados. Estos son muy eficaces y no le quitarán el brillo natural que tienen las láminas. Se tiene que aplicar con una esponja suave, evita utilizar las de alambre o cepillos con cerdas muy duras, ya que puedes dañar la lámina. Muchos de estos productos, además de limpiar el suelo, hacen que se vean más brillantes.
• Cambiar un listón: Este es el problema más inusual entres los tres. Las piezas que se hayan soltado, ya sea por el uso intenso o que se hayan mojado por una rotura de tubería o inundación tienen que ser cambiadas. En estos casos extremos es mejor reemplazar toda la pieza que intentar repararlas. Esta no es una tarea muy difícil, ya que muchos suelos de este tipo vienen con un sistema de clics para colocarlos.

Te hemos enseñado algunas técnicas de cómo reparar daños leves en los suelos laminados, son algunas reparaciones que puedes llevar a cabo tú mismo. Aunque también podrías contratar expertos en instalación y reparación de estos pavimentos si no crees que puedas hacerlo.