La justicia electoral de Brasil revocó el jueves la prisión preventiva del exgobernador de Rio de Janeiro Anthony Garotinho, detenido la semana pasada acusado de fraude electoral, aunque le impuso una serie de restricciones en espera de un veredicto.

Garotinho, gobernador de 1998 a 2002 y número dos en la alcaldía de Campos (estado de Rio de Janeiro), fue detenido el 16 de noviembre, acusado de comprar votos en las elecciones municipales de esa localidad, en octubre.

El excandidato presidencial, de 56 años, ingresó poco después en un hospital donde lo operaron y desde donde impulsó una serie de recursos para que la medida de prisión fuera revocada.

Finalmente, este jueves, el plenario del Tribunal Superior Electoral (TSE) votó por seis votos en favor y uno en contra "la sustitución de prisión de Garotinho para que se recupere en su domicilio" con una serie de medidas obligatorias, explicó a la AFP una fuente del tribunal.

Entre esas medidas figura el pago de una multa de 88.000 reales (unos 26.000 dólares) y las prohibiciones de ir a Campos, de estar en contacto con testigos del caso, y de ausentarse de su nuevo domicilio sin autorización del juez durante más de tres días.

El exgobernador, cuyo desesperado ingreso en la ambulancia tendido en una camilla y con la camisa abierta causó revuelo en Brasil, celebró la medida en su blog y denunció haber sido víctima de "abuso de autoridad".

"No estoy acusado de corrupción, de enriquecimiento ilícito o de cualquier desvío de dinero público sino, solamente, de una posible irregularidad electoral. Y privarme de la libertad por eso es una verdadera afrenta al estado democrático de derecho", manifestó.

Un día después de la detención de Garotinho, la policía brasileña detuvo a otro exgobernador de Rio, Sergio Cabral (2007-2014), acusado de ser el cabecilla de una "organización criminal" que desvió decenas de millones de dólares de obras públicas.