Con un estupendo trabajo del uruguayo Robert Flores, quien estuvo bien acompañado por Fabbiani y Falcao, River se impuso merecidamente por 3 a 1 como local frente a un Tigre que después de abrir el marcador se borró, literalmente, de la cancha.

El zurdazo con el que Leandro Lázzaro abrió el marcador cuando apenas se habían jugado dos minutos hizo presagiar lo peor para River. Pero esa sensación se fue disipando con el correr de los minutos, por obra y gracia de Tigre. Es que el equipo de Victoria, lejos de aprovechar el golpe que significó el gol, y los problemas que causaba de mitad de cancha hacia adelante la dupla Luna-Lázzaro, prefirió refugiarse en su campo, confiado en el buen trabajo de Paparatto y Blengio, pY eso le vino mejor a River, que durante gran parte del primer tiempo casi no generó chances de peligro. Apenas exhibió las subidas por derecha de Ferrari y la predisposición del uruguayo Flores para convertirse en el eje del equipo. Y fue justamente el enganche el encargado de conseguir el empate a los 39 minutos. La jugada la inició él mismo, al llevarse la pelota en mitad de cancha; en la puerta del área grande combinó con Fabbiani, éste le devolvió el balón y el delantero sacó un zurdazo, que Islas no pudo retener y sólo alcanzó a rechazar. El rebote le cayó nuevamente a Flores, quien con un puntazo alto de derecha, marcó el 1-1. Tranquilidad para Gorosito y compañía. ara esperar un contraataque.El momento de quiebre del partido se produjo a los 11 minutos del complemento, cuando Gorosito se decidió a romper el esquema del doble 5 e hizo entrar a Falcao por Barrado. Con el ingreso del delantero colombiano, Flores tuvo alguien con quien jugar, y Fabbiani ganó en confianza. La influencia de Falcao se vio reflejada seis minutos después de su ingreso, cuando el colombiano marcó el 2-1, tras recibir un preciso pase de Flores.

Ahí se acabó el partido, porque Tigre se cayó definitivamente y River continuó creciendo, y lejos de conformarse con el gol de ventaja, fue en busca del tercero.Ese gol pudo llegar rápidamente, pero Fabbiani no supo definir en dos oportunidades (en una de ellas Arruabarrena desvió la pelota a un metro de la línea de gol). Sin embargo en la tercera oportunidad, el Ogro mandó la pelota al fondo del arco. Corrían 42 minutos, cuando en la puerta del área grande se produjo una gran triangulación entre Falcao García, el debutante Eric Lamela y Fabbiani, quien tras dejar en el camino a un defensor con un gran enganche, sacó un preciso derechazo que depositó la pelota dentro del arco.

La tarde comenzó para teñirse de negro, pero River supo cambiar a tiempo, gracias a Flores, Fabbiani y Falcao, y se llevó una victoria sumamente merecida, ante un rival que salvo los dos primeros minutos, no estuvo en la cancha.