Los cinco candidatos a la presidencia de Israel lo tendrán difícil para alcanzar la talla política del jefe de estado saliente, Shimon Peres, quien consiguió utilizar esta función protocolaria para promover un mensaje político a favor de la paz.

El Parlamento israelí, la Knesset, elegirá el próximo 10 de junio al sucesor de Peres. Uno de los candidatos, el laborista Benjamin Ben Eliezer, retiró su candidatura el sábado, tras ser acusado de corrupción.

El candidato favorito es Reuven Rivlin, expresidente del Parlamento y miembro del Likud (derecha nacionalista), partido del primer ministro, Benjamin Netanyahu.

El resto de candidatos en liza -Dalia Dorner, Meir Sheetrit, Dalia Itzik y Daniel Shechtman- optarán a la presidencia que deja, a sus 90 años, el popular presidente saliente, Peres, tras un mandato de siete años.