Saber qué tipo de productos emplear en el cuidado de la piel es un aspecto básico para poder tratarla adecuadamente. Y seguro que tú también quieres tener bien cuidado el órgano más extenso de todo tu cuerpo.

Si es así, sigue leyendo porque lo que te contamos en este post te va a interesar, y mucho.

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Dicho lo cual, ahora te vamos a dar algo más de información sobre cómo elegir la crema perfecta para la tratar la piel de tu rostro. Ya te adelantamos que esta decisión dependerá de diferentes factores.

¿Sabes cuáles son?

El tipo de piel que tengas, el nivel de hidratación que tengas actualmente o la edad son algunos de las señales a las que vas a tener que prestar más atención para elegir el tratamiento ideal para ti.

Lo primero que necesitas saber es que en función del tipo de piel que se quiera tratar se ha de utilizar un tipo de cremas u otro. De esta manera, vamos a poder diferenciar al menos, cinco tipos de pieles:piel normal, piel seca, piel grasa, piel mixta ypielessensibles.

El segundo factor que debemos tener en cuenta a la hora de escoger la crema para el rostro que mejor se ajusta a nuestras necesidades y expectativas es el objetivo que perseguimos. Y es que deberemos saber qué queremos conseguir utilizando esa crema facial. Diferenciaremos tres grandes etapas, con un objetivo cada una:

1. Hasta los 25 años.Podríamos usar un tratamiento hidratante continuo para evitar el envejecimiento y otros problemas como el acné. Principalmente, para pieles grasas.
2. Entre 25 y 40 años.La idea ahora es empezar tratamientos preventivos para las primeras imperfecciones y signos de la edad.
3. A partir de los 40 años.Es el momento de los tratamientos específicos contra las arrugas y la sequedad, aunque sigue teniendo sentido utilizar los anti-edad.

Existen diferentes tipos de cremas para el rostro. A continuación, comentamos brevemente algunas de las más importantes:

1. Cremas reafirmantes. Su objetivo principal es el de conseguir que tu piel tenga una apariencia más tersa y firme.
2. Cremas exfoliantes. Sirven para obtener una piel más suave y lista, libre de imperfecciones, como puntos negros o acné, entre otros.
3. Cremas antimanchas. Te ayudan a eliminar las manchas en la piel y previenen la aparición de nuevas imperfecciones de este tipo.
4. Cremas anticelulitis. Las anticelulíticasson cremas pensadas para prevenir la proliferación de infecciones cutáneas bacterianas futuras y/o combatir las presentes.
5. Cremas antiestrías. Previenen la aparición de estas desagradables líneas en la piel.

Utilizar la crema correcta en cada caso es crucial para realizar adecuadamente el tratamiento, según el tipo de piel y el objetivo que queramos conseguir. De la misma manera que no te cepillarías los dientes con jabón, no deberías utilizar una crema antimanchas si tu objetivo es tener una piel más firme.