Central, querido mío! Como nos hacés sufrir, por favor!

Un partido, sin dudas con todo a favor de Rosario Central.

Si analizamos detenidamente, logramos ver que el equipo rival sólo llego dos o tres veces al área de Central (como en partidos anteriores).

Nos encontramos ante un Lanús desbastado, golpeado por su derrota anterior, un Lanús caliente. & así llega la expulsión de Marchesín, que tuvo una actitud estúpida, egoísta y grosera al querer defender lo indefendible: el penal.

El penal, que al final fue mal pateado por Domínguez (que viene con partidos malos y llegó a la 5º amarilla), sin dudas fue penal.

Central tiene mucho poder ofensivo, pero sigue sin ideas. El hecho de haber encontrado a este Lanús (y a esa expulsión) talvez fue lo que empujó más al equipo. Pero, seamos realistas, nunca se notó el hombre de más.    

Aunque, la preocupación para el próximo partido (frente a Boca) es, sin dudas, el reemplazante de Nery Domínguez: Ballini o Ledesma, aunque conociéndolo a Russo…

Central, pese a haber muchas falencias, tiene demasiado para dar, para trabajar.

Pero, tiene una seguidilla de partidos jodidos. Tenemos que seguir sumando, no podemos regalar puntos.

 El lunes se demostró que si ponen un poco de actitud, un poco de huevos, se puede. Como será que, hasta Lagos hizo el gol. Pero, que una cosa no quite a la otra. Con un gol no podemos dejarnos comprar, es un impresentable que hace 50 partidos estamos aguantando (como tantos otros, no?).

Fue un partido lindo, emocionante, infartante. Sin sufrir no se puede estar.

El amor, la pasión por esta camiseta es impresionante y queremos verlo bien, queremos que juegue bien. Tenemos herramientas. Pero, Russo, seguimos en descenso directo, che.

& aún así, se demuestra una vez más, que pese a todo, amor como el guerrero no queda ninguno.